“El mundo nos manda basura, nosotros le regresamos música.” –Favio Chávez, director de orquesta.
Latas, tenedores, cucharas y trozos viejos de madera son algunos de los materiales con los que niños paraguayos de bajos recursos elaboraron los instrumentos musicales que han transformado sus vidas. Lo que para todo mundo es basura, para el director de Sonidos de la Tierra, Luis Szarán, fue la oportunidad de darles una herramienta para mejorar su futuro a muchos jóvenes que viven en situación de pobreza. Hoy, la Orquesta de instrumentos reciclados de Cateura es una muestra del poder transformador que puede llegar a tener la música.
Compartimos aquí el cortometraje titulado “Landfill Harmonic” que retrata la historia de los jóvenes que gracias a sus instrumentos hechos de basura encontraron su pasión. No cabe duda que la basura de unos, es el tesoro de otros.