Aunque nunca sabemos qué es exactamente lo que comen en la película “Antonia” (1996), repetidas veces aparece una mesa que lo único que causa es dar ganas de sentarse y compartir cada uno de los platillos.
Por Analhi Aguirre
La directora, de pronunciada ideología feminista, –aunque se podría dudar de tanta radicalidad, por ciertos eventos que suceden en el film- se encarga de mostrar cómo en un hogar como el de Antonia siempre la hora de la comida es acogedora, libre y feliz.
Les compartimos la película completa, porque vale mucho la pena.