MAPAS GOURMET

Come / Viaja / Vive

MAPAS GOURMET

El café turco, mucho más que una bebida

©DNews
©DNews

El café es protagonista de las mañanas de millones de personas alrededor del mundo. A lo largo de la historia, esta bebida ha inspirado leyendas e incluso se le ha calificado como una droga debido a sus propiedades estimulantes y adictivas.
Por Fernanda de la Torre
El café es un elemento importante de la cultura árabe. Para los turcos, más que una bebida, es símbolo de orgullo e identidad, tanto que el café turco o Türk kahvesi ha sido declarado Patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO; título que se refiere no propiamente a la bebida, sino a una manera particular de servir y preparar esta infusión aromática.
Invasión africana
Este grano tiene su origen en Etiopía y existen muchas historias sobre su llegada al mundo árabe, donde rápidamente se popularizó debido a la prohibición del alcohol en este territorio por cuestiones religiosas. Algunos dicen que fue gracias a un peregrino que se dirigía a la Meca que este grano llegó por primera vez al Medio Oriente. Otros creen que fue llevado por prisioneros de guerra que habían visto cómo en África se preparaba una bebida que dotaba a los guerreros de una energía que parecía imparable. Cualquiera que sea la verdadera historia, es un hecho que su sabor y efecto estimulante fascinaron al mundo musulmán tanto que en el siglo XVI se prohibió su consumo, pero no fue por mucho tiempo, ya que la presión social provocó que se revocara la decisión pocos años después.
Paso a paso
©Batuta
©Batuta

Hoy en día el café está presente en las mesas de todos los hogares turcos como símbolo de identidad cultural. Se prepara tradicionalmente con granos de café arábiga molido tan fino como el harina y, a diferencia de un americano que está listo con sólo presionar un botón, éste requiere de atención y algo de paciencia. Primero, se necesita una pequeña olla de latón o cobre llamada cezve. A ésta se agrega el agua (dependiendo de el número de tazas que quieras preparar), luego el café y por último, si así se desea, un poco de azúcar. Se coloca directo sobre la flama sin revolver, cuidando que no llegue a ebullición en ningún momento. Una vez que todos los sólidos se van al fondo del recipiente, se revuelve el café con una cuchara hasta formar espuma. Después se deja el cezve sobre una flama baja hasta que una capa gruesa de espuma cubra la superficie; en ese momento se retira del fuego. El café se sirve en tazas tipo espresso acompañado de un vaso de agua fría para limpiar el paladar y refrescar la boca.
Café y matrimonios felices
TB-turcoComo parte de las tradiciones turcas, cuando un hombre pide la mano de su novia a la familia, los padres deben acompañar a su hijo a casa de la futura esposa para pedir la bendición. Durante esta reunión, la novia prepara café para todos y es una costumbre que ella agregue un poco de sal a la taza de su futuro esposo con el fin de “medir su temperamento”. Así como ésta, existen más costumbres alrededor del café, propias de distintas culturas del mundo árabe que dotan de identidad a cada una de ellas.
Se puede decir, entonces, que el café forma parte importante de su identidad cultural. Es un emblema de la gastronomía turca que complementan una cocina llena de aromas y sabores complejos. Cuando se está en Turquía, tan importante es visitar Hagia Sophia o el Gran Bazar, como sentarse a disfrutar una taza (o varias) de esta bebida llena de significado mientras se contempla el día a día de una cultura tan rica y tan opuesta a la propia.

0 comentarios en “El café turco, mucho más que una bebida”

  1. Pingback: El té, bebida nacional de Turquía | Tomate Blog

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.