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Preparando el desayuno con los niños

Una buena forma para que los niños se mantengan entretenidos cuando están en casa, y además tengan tiempo de convivir con sus padres y no quedarse frente a la televisión, es involucrarlos en las tareas de casa; una buena opción para empezar es el desayuno.

Por Antonieta Torres

Cuando los niños se van involucrando en la cocina, se les despierta mucha curiosidad, ya que en ocasiones les parece un misterio lo que allí se hace y lo que se logra con los alimentos; además de que van conociendo las fuentes de su comida en estado primario.
Es importante, también, que se sientan parte de algo que va a hacer feliz a los demás, esto es, que no sólo preparen el desayuno que ellos consumirán, sino que se les haga notar que las porciones serán para todos, con el afán de compartir.
Cuando colaboran en alguna tarea, es importante asignarles actividades y, si es posible, darles a escoger qué les gustaría hacer más, mostrándoles cómo hacerlo y dejando que ellos lo hagan solos.

Dependerá de la edad del niño que se le asigne una u otra tarea; casi nunca es posible que tengan acceso a la estufa o a objetos punzocortantes, por el cuidado de que no sufran un accidente. Sin embargo, hay muchas funciones que no implican el uso de objetos peligrosos, y que se incluyen en preparaciones que generalmente les gustan mucho.

  • Hot cakes con fruta: se les puede pedir que midan los ingredientes, que batan la masa y ,cuando estén listos, que decoren con frutas, o miel, o alguna mermelada, según el gusto del privilegiado consumidor.
  • Jugos: Preparar los jugos que acompañarán el desayuno puede ser una buena opción para los niños, aunque después de un rato pueden sentirse aburridos o cansados, por lo que pueden variar ésta tarea usando diferentes frutas. Por ejemplo, un rato puede exprimir las naranjas y otro encargarse de limpiar otras frutas para una ensalada.
  • Montaje: ¿Por qué no proponerles que monten la mesa como se les ocurra?, es decir, colocar en la mesa todo lo necesario y después pedirle al niño que lo distribuya como le guste. Quizás, al final, tengamos que explicarle por qué la servilleta es necesaria pero que, si no le gusta, la puede poner doblada o escondida incluso. Desde el inicio dejar que ellos escojan qué utensilios les gustan más para desayunar ese día.
  • Servicio: Otra forma de motivarlos a ayudar es pidiéndoles que durante el transcurso del desayuno sean ellos los encargados de servir el jugo, la leche, o también de llevar los platos a cada comensal.
  • Preparación de alimentos: Pueden untar una rebanada de pan para hacer un sándwich, un poco de mantequilla en los hot cakes recién preparados o poner algún ingrediente sobre otro, por ejemplo queso, o jamón, que también les ayuda a mejorar su destreza al usar utensilios.

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