El verano está por acabar y eso significa que los niños deben volver al colegio. Ellos pasan muchas horas estudiando y los padres son los responsables de asegurar la correcta nutrición de sus hijos al prepararles todos los días su lunch. ¿Por qué no también procurar que éste sea amigable con el medio ambiente? Te damos seis consejos para que compartas con los más pequeños las razones que hay detrás de lo que encuentran en su lonchera.
Evita los empaques innecesarios
Procura evitar esa comida que viene racionada y empaquetada individualmente, así ahorrarás enormes cantidades de plástico y tu hijo te agradecerá no tener que buscar dónde tirar tanta basura.
Elige ingredientes locales, orgánicos y de temporada
Intenta que el lunch de tus hijos contenga al menos una ración de frutas y una de verduras frescas y que éstas sean locales y de temporada. Recuerda que al elegir ingredientes orgánicos, evitas que consuman pesticidas y agroquímicos. Sí, son más caros que los productos del supermercado, pero la salud de tu familia lo vale.
Reduce la cantidad de carne y lácteos
Al reducir el consumo de todo tipo de carnes, reduces en gran manera el impacto negativo sobre el medio ambiente. Platica con tus hijos acerca del Lunes sin carne y juntos propongan opciones de lunch que beneficien la salud tanto de tus hijos como del planeta.
No uses desechables
En lugar de guardar el lunch de tus pequeños en empaques desechables que contaminan, utiliza cubiertos y recipientes resellables de plástico. Además de evitar la producción de basura, enseñas a tus hijos a ser más responsables ya que deberán regresar estos utensilios a casa.
Elige un termo con agua fresca
Los jugos de frutas empacados están llenos de ingredientes químicos. Al empacar un termo con agua de frutas naturales que puedes endulzar con un poco de miel, evitas generar basura, utilizar popotes de plástico y que tus hijos consuman cantidades exhorbitantes de azúcar.
Olvídate de la “comida para niños”
La idea de que los niños deben comer distinto a sus padres es absurda. Esto únicamente ha provocado que los niños coman más chatarra y comida procesada que no es buena para su salud. La “comida para niños” es un truco de marketing.
Así que ya sabes, sigue estos sencillos consejos para asegurar que tus hijos tengan una dieta más sana y que sea un granito de arena para contribuir al mejoramiento del medio ambiente.
¿Qué mejor que saber que estás cuidando la salud de tu familia y del lugar en el que viven?