Santa Julia, la destacada marca de vinos, responde a las tendencias del mercado con producción sustentable y responsabilidad social.
Santa Julia es la bodega de vinos que tomó su nombre en honor a Julia Zuccardi, la nieta de su fundador, Alberto Zuccardi, en el año 1982. La bodega se encuentra en Mendoza, la provincia con mayor producción vitivinícola de Argentina.
Vitivinicultura orgánica y producción sustentable en Bodega Santa Julia
La agricultura orgánica es un sistema de producción que mantiene la salud de los suelos, los ecosistemas y las personas.
Santa Julia es considerada el productor orgánico número 1 de la región, distinción que se debe a su filosofía de negocios sustentable. Ésta incluye actividades amigables con el medioambiente, en las diferentes etapas de la elaboración de los vinos.
Entre estas actividades se destacan la elaboración de fertilizantes naturales para los suelos de cultivo. Como lo son las 10,000 toneladas de composta que producen al año y el Humus de Lombriz. Adicionado a lo anterior, su plantación de verdeo (cebada, centeno, vicio y sorgo) se enfoca en la salubridad de los suelos.
Por otro lado, las 300 hectáreas con certificación orgánica en las que siembran y cosechan las uvas, la han transformado en la empresa con más cultivos orgánicos de la Argentina.
Trabajar en armonía con el medioambiente en Santa Julia implica también tener una planta de tratamiento del agua, en la que ésta es reutilizada.
La valoración que reciben las personas influye en la calidad de los vinos
Bodegas Santa Julia se basa en valores fundamentales que definen cada acción que decide llevar a cabo la empresa. Ellos son: Calidad, Innovación, Cuidado del Medioambiente y Cuidado de la Gente.
Pero el concepto de sustentabilidad también incluye a la gente que allí trabaja.
Desarrollar proyectos educativos, deportivos, recreativos y culturales son los objetivos de Santa Julia en relación con las comunidades de las que forma parte.
Orientado a ellas, creó jardines maternales y escuelas para los niños. También, el centro cultural brinda la oportunidad a trabajadores y no trabajadores de la empresa, de disfrutar de un salón de usos múltiples, una biblioteca, salas de computación y un gimnasio. Además, se desarrolla un programa durante la jornada laboral, destinado a apoyar a sus trabajadores para terminar sus estudios escolares.
Una parte de la visión de la empresa está enfocada en mejorar la calidad de vida de la gente.
“El cuidado de la gente y del medioambiente están presentes en Santa Julia desde siempre, ya que fueron prioritarios para mi abuelo. Él decía que para hacer un buen vino hay que tener buena gente”.
“Tuve la suerte de trabajar con mi abuela y aprender de ella lo que fue generando en materia de responsabilidad social”
Julia Zuccardi
Comercio justo
Dos de los principales viñedos de Sata Julia son certificados Fair For Life. Esto permite un más justo desarrollo de las actividades socioeconómicas de los trabajadores. Lo que implica en los hechos que parte de las ganancias vuelven a la comunidad y deben ser usadas con fines sociales.
Bodegas Santa Julia y las tendencias del mercado
NOTAS DE CATA
Color: Rojo intenso con reflejos violáceos.
Aromas: Frutado, con aromas que recuerdan a frutas rojas maduras como ciruelas, frutillas y moras.
Sabor: Suave y agradable, con taninos sedosos y acidez en equilibrio. Presenta un carácter varietal bien definido.
Uva: 100% Malbec.
Desde el año 2020, Santa Julia busca llegar a los nuevos consumidores y responder a las nuevas tendencias del mercado.
Hay una demanda, una tendencia de consumo, que ha ido evolucionando con mayor fuerza cada vez. Está dada por la necesidad que tienen los consumidores de dejar de consumir alimentos de origen animal y de volcarse al consumo de vegetales. Además de eso, evitar consumir productos que contengan ingredientes de origen animal o que realicen testeos en los mismos.
Esto también se traslada al consumo de vinos.
Vinos con certificación vegana
Como respuesta a lo anterior, Bodega Santa Julia logró que se plasme en sus etiquetas el sello de certificación vegana. El mismo confirma que durante el proceso de producción de los vinos no se ha utilizado ninguna sustancia de origen animal.
Por ejemplo, para generar partículas de fermentación en los vinos blancos, normalmente se utiliza huevo como aglutinante. Pero este producto de origen animal no se utiliza en los procesos de elaboración de los vinos de Santa Julia. Es reemplazado por proteína de papa y de arveja, sin variar la calidad del sabor y aroma de los mismos.
En los vinos tintos usan dentonita, una arcilla avalada por el Instituto Nacional de Vitivinicultura. La técnica aplicada no modifica las propiedades organolépticas del vino y permite así estar alineados con la sustentabilidad del medioambiente.
Con todo esto Santa Julia responde con excelencia al interés de los consumidores.
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